¡UNA DIADEMA PARA TODAS!
*Escrito por Alejandra García, misionera voluntaria en Génesis sirviendo en Santo Domingo, República Dominicana
Hace año y medio, viajábamos cada domingo a la Iglesia del Nazareno en una comunidad llamada Chacalte, Guatemala. Me encantaba ir a ese lugar y ver el hermoso paisaje entre las montañas. Después de tener una semana de trabajo en cuatro paredes, éste lugar me transportaba.
No solo era el paisaje, sino la bendición de ver a los niños en la iglesia Infantil, siempre puntuales, dispuestos a aprender y con una hermosa sonrisa que nunca podía faltar. No era algo común que los niños fueran vestidos de manera distinta a los otros… Pero un domingo cualquiera, una de las niñas tenía algo diferente, ¡una hermosa diadema en su cabello!, con perlas y listones las cuales la hacían destacar del resto.
Al transcurrir la clase, me di cuenta que la diadema no la tenía la dueña… sino la niña de al lado, y al tiempo la hermosa diadema pasaba de niña en niña. Ellas no necesitaban ser la dueña, solo sentirla un momento en su cabello. Al terminar la clase bíblica, la última niña por la que había pasado la diadema se la entregó a la dueña.
Al observar aquello, venía a mi mente, cuan distinto seria todo, si en los corazones de los adultos existiera la misma bondad de un niño, pues una sola diadema fue suficiente para hacer feliz a 8 o 10 niñas, y no necesitaron ser dueñas de una.
Cuando el corazón está puesto en las cosas materiales…nada lo llena. El egoísmo es el número uno en las cualidades, y se olvida de lo realmente importante: la bondad, el amor al prójimo, perdonar, tener paz, gozo y disfrutar de los pequeños y grandes detalles de la vida y las bendiciones que Dios nos dé.
“Porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar” (1 Timoteo 6:7).
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