Con todas las guerras y el sufrimiento actual en Siria* y en Egipto, ¿has leído Isaías 19:19-25 recientemente? ¿Has pensado en sus implicaciones asombrosas para nuestras vidas y nuestro mundo hoy día? He aquí la profecía de Dios:
En aquel día habrá un altar para el Señor en el corazón mismo de Egipto, y en su frontera un monumento al Señor. Esto servirá en Egipto de señal y testimonio del Señor Todopoderoso. Cuando ellos clamen al Señor por causa de sus opresores, él les enviará un salvador y defensor que los librará. De modo que el Señor se dará a conocer a los egipcios, y en aquel día ellos reconocerán al Señor: lo servirán con sacrificios y ofrendas de grano; harán votos al Señor y se los cumplirán. El Señor herirá a los egipcios con una plaga, y aun hiriéndolos, los sanará. Ellos se volverán al Señor, y él responderá a sus ruegos y los sanará.
En aquel día habrá una carretera desde Egipto hasta Asiria. Los asirios irán a Egipto y los egipcios a Asiria, y unos y otros adorarán juntos. En aquel día Israel será, junto con Egipto y Asiria, una bendición en medio de la tierra. El Señor Todopoderoso los bendecirá, diciendo: «Bendito sea Egipto mi pueblo, y Asiria obra de mis manos, e Israel mi heredad.»
Recuerda, la bendición de Dios no es solamente para el pueblo de Israel y no es exclusivamente para TI. ¡Su plan y misión es redimir y bendecir a toda su gente!
*Nota: Asiria de la Biblia incluye, pero no es políticamente igual al país de Siria hoy día.
Deja un comentario