Los medios de Dios no son convencionales, y su sabiduría no tiene fin. ¡Él es quien nos sorprende con sus maneras de actuar! Cada día aprendemos algo nuevo de Dios. La tercera edición de Misión sin Límites en la Región Mesoamérica https://transformaelmundo.com/2021/04/09/etapa-tres-de-mision-sin-limites-se-lleva-a-cabo-en-mesoamerica/ llevada a cabo del 29 de marzo al 4 de abril de 2021, fue sin duda un tiempo de aprendizaje y sorpresas. A continuación, presentamos algunos testimonios de los que experimentaron un Dios sin límites durante esta oportunidad de servir.

“Fue maravilloso participar en esta oportunidad misionera y ver la mano de Dios obrar a nuestro favor en el lugar que servimos. Lo que más me impactó fue ver el apoyo e involucramiento de la Iglesia de la comunidad de San Juan en nuestras actividades. Los jóvenes de la iglesia estuvieron sirviendo junto a nuestro pequeño equipo de 4 misioneros. ¡Gracias a Dios y al respaldo de una iglesia misional, pudimos sembrar la palabra de Dios en muchos corazones e impactar la comunidad! Además como equipo, fuimos de inspiración para los jóvenes que nos apoyaron, algunos de ellos decidieron inscribirse a la Escuela de Liderazgo en Misiones Transculturales, porque quedaron con el deseo de aprender más e involucrarse en misiones. Creo que Dios está levantando una generación misionera en este lugar. Doy gracias a Dios por la vida de Lional, Isamaris y Ariza, por ser ejemplo para la comunidad y a la iglesia local por respaldarnos en este servicio.”- Lioni Taveras.
“Ser parte de este evento fue una gran bendición”. Días antes yo no estaba segura de participar, pues no estaba muy bien de salud, debido a dolores muy intensos en mi columna. El médico había indicado realizarme una resonancia muy costosa y todo apuntaba a que no podría ser parte de esta misión. En todo este tiempo mientras trabajaba, oraba a Dios: “Señor me gustaría ir a esta actividad, si está en tu voluntad, con dolor y sin dolor, yo quisiera ir. También te pido Señor, que hagas los arreglos en mi trabajo. No pediré permiso para faltar, en esto conoceré si es tu voluntad que yo vaya”. Dios obró de una manera muy especial en mi salud y trabajo, y pude ser parte de esta semana de servicio.
El primer día de evangelismo fue de mucha bendición y a la vez, de mucha confrontación. Conocimos a personas que tenían tristeza porque habían perdido familiares por COVID-19. Dios me motivaba a compartir de la consolación con la que yo fui consolada por la muerte de mi hija, y también las tarjetas evangelísticas que llevamos tenían palabras de ánimo para el momento oportuno. Fue un momento maravilloso cuando oramos y adoramos juntos. Me dio mucha alegría ver cómo Felicia, Luis Miguel, Piter, Yanelis y Stefani se entregaban a servicio y pasión en cada actividad que ellos realizaban.
Misión Sin Límites nos acercó más a las personas y nos ayudó a ser más humildes de corazón y a ser compasivos.” – Maribel Duson.
“Misión Sin Límites se convirtió en una de las experiencias en la que el Señor habló a mi vida. En ocasiones, cuando participamos en estos proyectos misioneros, solemos tener una expectativa en que Dios use un milagro o que mueva una montaña para captar una enseñanza de su parte. Pero este no fue mi caso.
El primer día de trabajo tuvimos la oportunidad de prepararnos con el tema de “Cuidado de la creación”, con el fin de conocer cuál ha sido el rol que Dios nos ha dado delante de ella. Luego de ese tiempo, juntos el equipo y algunos hermanos de la congregación, salimos a recoger todo el plástico en la comunidad.
En un momento, al bajar mi mirada vi que la alcantarilla tenía mucho plástico acumulado. Comencé a quitar ese plástico y al instante, vi como una gran cantidad de agua empezó a correr. Entonces sentí en mi corazón cómo Dios me enseñaba el valor de nuestras pequeñas acciones y el impacto que provoca en las vidas de los demás. A veces cometemos el error de desvalorizar acciones, de llevar la Palabra por nuestras pobres expectativas. Sin embargo, Dios usa lo más pequeño para transformar a muchos.” – Esteban Juan Alcántara.
Es evidente que Dios nos habla a través de las diferentes circunstancias: dolor, tristeza, enfermedad o pérdida. Dios forja nuestro carácter en amor y nos llama para su servicio, en el que encontramos propósito y plenitud. ¡Cada uno de los participantes en los diez sitios diferentes ha sido testigo de las maravillas de un Dios imparable!
¡Qué hermoso todo lo que Dios hace alrededor del mundo! ¡Somos la iglesia imparable, el cuerpo de nuestro incomparable Dios! ¡A Él sea la gloria por siempre! ¡Adelante, Región Mesoamérica!